Hotel Selina Cuenca, Cuenca

El hotel tiene una ubicación excelente, cerca del centro y con vistas al río Tomebamba. Las habitaciones son cómodas, aunque el balcón no tiene cerrojo, lo cual puede ser un inconveniente. El servicio es muy amable y servicial, pero la experiencia gastronómica podría mejorar, ya que los precios son un poco altos en comparación con lo ofrecido. Sin embargo, los espacios compartidos son muy agradables y hay clases de yoga que disfruté mucho.

El hotel tiene una ubicación increíble, justo al lado del río Tomebamba y a pocos minutos del centro. Las habitaciones ofrecen una vista preciosa, pero las paredes son muy delgadas, se escucha todo lo que sucede en las habitaciones contiguas. Además, hubo bastante ruido de la calle y un olor a comida rápida que no fue ideal. El personal fue amable, pero la calidad del servicio pudo haber sido mejor en algunos aspectos.

Me alojé en este hotel y la ubicación es realmente excelente, justo al lado del río y cerca de buenos bares y restaurantes. Las habitaciones son más grandes de lo que esperaba, pero la verdad es que hay mucho ruido de la calle y además huelen a comida rápida por tener ventanas hacia la calle. El servicio fue agradable, aunque a veces no tan útil. En general, es un lugar cómodo pero hay que tener en cuenta el ruido y los olores.

El hotel tiene una ubicación excelente junto al río Tomebamba, a solo unos minutos del centro y rodeado de buenos restaurantes. Las habitaciones son cómodas, aunque una de ellas tenía un balcón que no cerraba bien y el ruido de una fiesta a las 4 am fue algo molesto. El servicio no fue el mejor, ya que el personal parecía un poco incómodo y no fue muy útil en cuanto a nuestras preguntas. En general, el hotel ofrece buenas vistas, pero la atención y el confort en las habitaciones podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación excelente, justo al lado del río y cerca de los mejores bares y restaurantes. Sin embargo, las habitaciones no fueron lo que esperaba; olían un poco a moho y estaban frías. El servicio fue amable y servicial, aunque me olvidé mis artículos de tocador y no pudieron ayudarme con eso. En general, es un buen lugar, pero hay algunos detalles que podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo al lado del río Tomebamba y muy cerca del centro de la ciudad. Las habitaciones tienen una vista increíble, pero lamentablemente, había olores desagradables y ruido de la calle que hicieron que la estancia no fuera ideal. El servicio dejó mucho que desear, ya que el personal no fue amable y hubo problemas con el agua caliente. En general, es un lugar con potencial, pero necesita mejoras en varios aspectos.

El hotel tiene una ubicación excelente, justo al lado del río y cerca de los mejores bares y restaurantes. Las habitaciones son cómodas, pero se pueden escuchar mucho a los vecinos y a la calle. El servicio fue variable, con algunos empleados amigables, pero otros no tan serviciales. Aunque la comida es buena, los precios son un poco altos. En general, es un lugar con buena relación calidad-precio, pero con algunas áreas que podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación excelente, mirando al río Tomebamba y a solo unos minutos del centro de la ciudad. Sin embargo, las habitaciones necesitan una buena limpieza, ya que olían a humedad y no estaban bien aspiradas. El servicio es útil, pero podría mejorar en algunos aspectos. En general, la relación calidad-precio es un poco justa debido a estos inconvenientes.

El hotel está en una ubicación perfecta, muy cerca del centro y con vistas increíbles del río Tomebamba. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, aunque un poco ruidosas por la noche. El servicio fue variable, con algunos miembros del personal muy amables, pero otros no tan útiles. En general, la relación calidad-precio es buena, pero el ruido puede ser un inconveniente.